Para la Matronería, en general, el nombre de Marta Prieto Méndez es sinónimo de la lucha contra el Cáncer de Mama. A lo largo de su vida y rol como Matrona, esta profesional titulada en la Universidad de Chile, ha deambulado por distintos niveles de atención de Salud e incorporándose al Ministerio de Salud, donde se desempeñó durante 28 años. Además, colaboró asesorando a OPS/OMS. Hoy, sigue colaborando con la Matronería como integrante del Comité Científico y asesora de cáncer en el Colegio de Matronas y Matrones de Chile y es parte del Comité Asesor de la RINC SLACOM, Sociedad Latinoamericana contra el Cáncer.
Tiene también un Diplomado en Administración y Servicio de Salud y un Magister en Salud Pública en la Universidad de Chile.
El ColMat conversó con Marta a propósito que este sábado 19 de octubre se conmemoró el Día Internacional contra el Cáncer de Mama.
-En términos generales, ¿Cómo está el Cáncer de Mama en Chile al año 2024?
-Ha ido en aumento y se han producido retrasos en los ingresos de las mujeres tanto en el diagnóstico llegando en estados más tardíos, en parte, provocado por la pandemia. Como se sabe el cáncer de Mama está en el GES, que es algo fantástico, que es el único país del mundo que tiene garantías, esto es plazos máximos para acceder a su atención. Sin embargo, igualmente hemos visto que hay retrasos y listas de espera.
En la actualidad, existen test genéticos y exámenes específicos que determinan terapias individuales, pero su acceso provoca una importante desigualdad en la población.
En ese sentido, considero que estamos al debe y es muy relevante que se actualicen las canastas y mejorar los registros.
-¿Qué significa actualizar las canastas?
-Bueno, estas por Ley debe actualizarse cada 3 años; sin embargo, en los últimos años, no ha habido muchas mejoras, lo que significa que sean producido avances tecnológicos y aparición de nuevos fármacos que hablan de una medicina personalizada, que no se han incorporado ni siquiera para grupos de riesgo. Las llamadas “canastas”, contienen las prestaciones que se garantizan a la población. Una de ellas, creada el año 2010 y que por diversos estudios muestran que las personas no la reciben por completo, es la denominada “Atención Integral a Mujeres con Cáncer de Mama” y tienen que ver con que toda persona desde la confirmación de su cáncer, tiene derecho a acceder a psiquiatra, psicólogo, kinesiólogo, nutricionista, entre otros profesionales.
-¿Cuántas mujeres se están muriendo de cáncer de Mama en Chile?
-El último dato, del año 2021, es de más de 1.700 mujeres que mueren anualmente por este cáncer, constituyendo la primera causa de muerte por cáncer entre las chilenas.
-¿Cuál es la colaboración que está haciendo el Colegio de Matronas y Matrones de Chile en este tema, la sociedad civil en general?
– Las matronas y matrones tienen un rol muy importante en este tema. De hecho, están en la puerta de entrada en la Atención Primaria de Salud. Por lo tanto, es fundamental su tarea en promoción, prevención, detección precoz y derivación oportuna. Por lo mismo, quisiera señalar la importancia que existan las matronas en los colegios, porque es muy importante que las mujeres conozcan su cuerpo y su mama desde siempre. Recuerdo las acciones de la Comisión de Salud y Educación y donde matronas trabajaban en los colegios y se coordinaban con los consultorios a mediados de los años 90s. Cuando trabajaba en Atención Primaria, en Puente Alto, iba a los colegios y a las y los estudiante les enseñaba sobre la Salud Sexual y Reproductiva y, también, la importancia de hacerse los exámenes preventivos. La matrona es fundamental porque debiera estar desde un comienzo y durante toda la vida.
En este punto, quisiera destacar la gran labor de las colegas que se desempeñan en las Unidades de Patología Mamaria (UPM) del país y su importante labor acompañando a las mujeres en el proceso de confirmación, tratamiento, seguimiento y si es necesario, en los cuidados paliativos y alivio del dolor e informando sobre los beneficios del GES.
El trabajo de las Agrupaciones de Mujeres y de la Sociedad Civil es muy importante y debe seguir mejorando.
-Existe una realidad en el Chile de hoy y es que existen un millón y medio de extranjeros en nuestro país, de los cuales hay muchas mujeres migrantes. ¿Qué está pasando con ellas con el cáncer de Mama?
-Existe una ley que protege a las migrantes, aunque estén irregularmente en Chile recibiendo las prestaciones de salud púbica y beneficios, acorde al tramo A de FONASA, se les hace una ficha provisoria y tienen acceso a todos los exámenes preventivos. Ellas tienen los mismos derechos que cualquier persona que habita este país. Igualmente, falta mucha información en la población migrantes, porque algunos vienen de países que no tienen Programas, con historia de trabajo de prevención y detección y ellas no acuden desgraciadamente. Sigo pensando en el trabajo que se podría hacer con las niñas y niños de los colegios porque, para este tema, sería una puerta de entrada maravillosa. Estoy pensando en los que hicimos, a medias de los años 90s, en los colegios sobre el tema del cáncer cérvico uterino que se llamó “un regalo para mamá” donde lo que hacíamos era trabajar con los profesores y alumnos. Se armaba un flujograma, un dibujo, donde los niños llegaban a casa y le preguntaban a su mamá, si tenían el Papanicolaou al día. A esa mamá, no la dejaban tranquila hasta que ella se iba a hacer el examen. Además, a esto ayudaba que en una reunión de apoderado, en el CESFAM más cercano, instalara un puesto para hacer el Papanicolaou y más fácil el proceso porque, muchas de esas mujeres, no podían en otro horario. Esto se podría hacer en la actualidad, porque hay que partir haciendo promoción desde la niñez para impactar en el cáncer de Mama.
-¿Desde el punto de vista farmacológico, científico, ha habido algún avance o nos mantenemos igual respecto al cáncer de mama?
-Si ha habido avances, pero al mismo tiempo han aumentado las desigualdades en el acceso, ya que se han identificado subtipos de cáncer de mama, como el “Triple Negativo”, que es un cáncer muy agresivo y que aparece en mujeres más jóvenes y requiere de tratamientos de alto costo. Sumado al 10 a 15 por ciento de casos con cáncer hereditario. Estos grupos, de alto riesgo no todos pueden acceder a un diagnóstico temprano y a tratamientos adecuados, porque no cuenta con los recursos económicos.
Ahora, está la Inteligencia Artificial para complementar, pero no reemplazar a la mamografía ni a los expertos, aumentando la cantidad de exámenes que se puedan realizar o hacer un colador anterior a lo que vea el experto. Con eso, habría la posibilidad de leer más mamografías y bajar los costos. Ahora, también, lo que nos puede ayudar mucho educando a las mujeres son las redes sociales. Se pueden hacer muchas cosas, seleccionando aquellas cosas que se hicieron bien se pueden volver a repetir, fortaleciendo los grupos de apoyo en la Sociedad Civil para empoderar a las mujeres en sus derechos.