La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró, el pasado 6 de diciembre, la ‘Partería, sus conocimientos, habilidades y prácticas’ como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. El anuncio fue realizado en el marco de la 18ª sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco (18.COM), que se celebra en Kasane, República de Botsuana.

La declaración es un reconocimiento mundial a la partería y su aporte en varias regiones del mundo al bienestar de las comunidades, la defensa de los derechos de las mujeres, la equidad de género, el bienestar y la paz.

“Las parteras de los ocho países participantes de esta nominación hemos dado este paso inicial para posicionar los saberes de la partería como parte del inmenso legado cultural del planeta, pues creemos firmemente que la partería es una práctica necesaria para garantizar el bienestar de las diversas comunidades humanas”, afirmó Liceth Quiñonez, directora de la Asociación de Parteras Unidas del Pacífico (Asoparupa), quien fue designada por el Gobierno Nacional para representar a Colombia y a las comunidades de parteras de Alemania, Chipre, Eslovenia, Kirguistán, Luxemburgo, Nigeria y Togo en el 18.COM.

Agregó que: “en medio de los conflictos sociales y ambientales propios de la modernidad, nosotras las parteras le apostamos a la vida y a su celebración en todas sus dimensiones y expresiones en nuestros territorios”.

Aunque el Colmat no es parte del grupo de los 8 países participantes, Chile cuenta con una extensa trayectoria de la Matroneria en chile. En 1834 este oficio era aprendido y enseñado por Parteras empíricas o mujeres con más experiencia y, desde 1834, por instrucción del Presidente de la época, se determinó la profesionalización de este oficio, creándose la Escuela de Obstetricia en la Universidad de Chile, lo que permitió -en los últimos 189 años- disminuir la mortalidad materna, fetal e infantil, asimismo la detección y control oportunos de las morbilidad en las etapas de gestación, parto y postparto, lo que ha llevado a destacar a nivel nacional e internacional el aporte en la Salud Pública y social de la matrona y matrón chilenos.