Es sabido que la lactancia materna es fundamental para el desarrollo infantil por que ayuda a prevenir diversas patologías e infecciones que puede llegar a sufrir un bebé. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda dar pecho al bebé mientras es vacunado, ya que ayuda a reducir el dolor.

El argumento a lo anterior es que en la lactancia materna podemos encontrar endorfinas, un químico que ayuda a disminuir el dolor. “Tetanalgesia” es el nombre que se le da a esta práctica.

Según el Grupo de Expertos de la OMS en asesoramiento estratégico en materia de la inmunización (SAGE), en términos generales se recomienda lo siguiente:

  • El personal que lleva a cabo la vacunación debe estar bien informado y tener una actitud calmada y cooperativa. Es preferible utilizar expresiones neutras; por ejemplo, «ahora se la voy a poner» que «ahora le voy a pinchar».
  • Es importante tener en cuenta la edad del paciente para colocarlo correctamente. Si se trata de un lactante o niño pequeño, es conveniente que les sostenga la persona que les cuida; para el resto de pacientes, lo más adecuado es sentarse con la espalda recta.
  • No se recomienda la aspiración (tirar hacia atrás del émbolo de la jeringa) durante las inyecciones intramusculares, ya que se puede aumentar el dolor
  • Cuando se inyecten varias vacunas de forma secuencial en la misma visita, deben administrarse de menor a mayor posibilidad de causar dolor.

Además , se recomiendan otras medidas específicas para los lactantes y niños pequeños:

  • La persona que cuida del niño debe estar siempre presente durante y después de la inyección.
  • Es conveniente dar el pecho a los lactantes durante la vacunación o inmediatamente después, siempre que no resulte contrario a las costumbres locales.
  • Se recomienda distraer a los niños menores de 6 años con un juguete, un vídeo o música.

El Dr. Philippe Duclos, asesor superior del Departamento de Inmunización, Vacunas y Productos Biológicos de la OMS, señala en el sitio web del organismo que que estas recomendaciones ayudarán a los padres y cuidadores, los pacientes y los profesionales sanitarios: «Cuando los padres saben qué pueden hacer para consolar a su hijo antes y durante la vacunación, se disipan las dudas”.

Fuente: www.who.int